01 junio 2007
Howe Gelb; descalzo en el parque
Hace unos meses asistí por primera vez a un concierto de Howe Gelb, y lo cierto es que de alguna manera me impactó y desde entonces he estado escuchando sus canciones, y prestando mucha atención a todo aquello que tiene que ver con él. Quizá su música en un principio no llamó tanto mi atención como la persona en sí y la actitud que muestra sobre y -ahora sé que también - fuera del escenario. Por eso quería entrevistarle a toda costa y la ocasión se presentó cuando volvió a nuestro país a principios de Mayo.
Gracias a la mediación de Joan – su no-agent agent - consigo quedar con El Hombre un rato antes de que tenga que probar sonido para su concierto en Madrid. Propone que demos un paseo y así, entre juegos de palabras – su pasatiempo favorito, juraría - comentarios sobre su reciente concierto junto a amigos invitados en el Barbican londinense y alguna que otra digresión acerca del éxito y el fracaso, llegamos a la altura de la Gran Vía donde varios limpiabotas ofrecen su servicio a los viandantes. Mr. Gelb mira sus botas gastadas y decide que necesitan un repaso. Mientras él observa atentamente cómo su calzado vuelve progresivamente a la vida, y yo le observo a él a unos metros de distancia, empiezo a sospechar que la entrevista probablemente ya ha tenido lugar y que mas me valdría recordar bien todo lo que ha dicho desde que empezamos a caminar.
Apostaría a que las entrevistas no son lo que mas feliz le hace en el mundo, lo que unido a su natural dispersión y a lo mucho que me impone este caballero, hace que me resulte casi embarazoso pedirle que nos sentemos unos minutos en algún lado, para poder así sacar mi grabadora y hacerle unas preguntas. Como en realidad es una persona afable, acepta aparcar por un rato su ritmo para seguir el mío. Sobre la hierba en la Plaza de España, se recuesta bajo una sombra y desatándose los cordones de las botas me hace entender que puedo empezar con la entrevista, lo que no es más - como verán - que continuar una conversación:
No dejas que pasen muchos meses entre tus visitas a España…
_ Sí… es que me gusta.
¿Te gusta tanto como para venirte a vivir?
_ Sí, podría mudarme aquí. A Córdoba, que está muy bien… ó Salamanca… Durango… No, no en Durango… ¡Bilbao! No se… Gijón… no… ¿Santiago? ¿Vigo?
Vaya, conoces un montón de ciudades…
_ Mmmm… Vuelva…
Es Hu-el-va. ¿Sabes que ‘vuelva’ sería ‘come-back’, en inglés?
_ ¡Pues perfecto! Ahí. No sé, Barcelona está muy bien también. Es que no me gustan las ciudades interiores y cerradas como Madrid…
¿Perdón? ¿No te gusta Madrid?
_Es que es como París… Necesita un poco de mar ¿no crees?, algún espacio abierto…
¿¡Pero no hay nada que te guste de Madrid!?
_ Bueno, me gusta el tipo que acaba de limpiarme los zapatos en Callao, es como el maestro Yoda; ha devuelto la vida a mis botas. Me gusta un restaurante mejicano que hay por Malasaña. Y la gente; encuentro buena gente en Madrid. Pero ya te digo que la ciudad… es como París…
Así que solo vienes aquí porque es un sitio en el que hay que tocar ¿eh?…¡Mira que no vuelves!
_ ¡Oh, no no no! ¡Me-en-can-ta-Ma-drid! Mira, llevame a cualquier sitio en España, y yo estaré bien. Simplemente Madrid, como ciudad, es demasiado grande para mí. París es muy grande para mí. Al menos cuando las ciudades tienen mar, puedes asomarte allí un poco y quedarte un rato mirando a la nada…
¿Necesitas quedarte mirando a la nada de vez en cuando?
_ Pues sí. Y además yo ya estoy muy mayor para las grandes ciudades. Prefiero las que son pequeñas.
¿Cuántos años tienes?
_ Cincuenta.
No eres tan mayor…
_ Ya hablaremos cuando llegues tú a los cincuenta...
Vale. Cuando te he visto tocar, siempre incorporas las cosas que ocurren en el momento. En lugar de enfadarte porque algo no te sale, o porque se escucha un ruido en la sala, lo incluyes, improvisas… y me pregunto si en el día a día también manejas con esa filosofía lo que te va pasando…
_ Vaya, qué error…
¿Hay un momento concreto en el que decidiste actuar de esta manera o siempre lo has hecho así?
_... ¡¡Es un error total!!
¿Esta entrevista es un error?
_ ¡No! ¡Vivir mi vida de esa forma fue un error! Y me doy cuenta ahora, a los cincuenta. Pienso en el pasado y… ah, no es buena idea. Demasiado disperso.
Pero esto de aceptar las cosas como vienen…
_Sí bueno, soy de los que piensan “a ver qué pasa”. Hay que saber estar alerta, los elementos te avisan de cuándo va a haber un cambio de planes. Haces planes, pero luego pasa lo que tenga que pasar. Es así como funciona la cosa.
Así que no planeas nada nunca…
_ Planea lo que quieras, y luego quédate a mirar como todo se descontrola. ¡Eso es el espectáculo!
Tú estás siempre colaborando con gente muy diferente, jóvenes - y menos jóvenes - que se sienten encantados de hacer cosas contigo. ¿Cómo te sientes sabiendo que otras personas te tienen como maestro, y que alucinan con poder aprender cosas de ti?
_ Bien, si esas personas me gustan… Porque es lo mismo que cuando te haces mayor, siempre tienes que darle a alguien lo que hubieras deseado que alguien te hubiese dado a ti. Tienes que pasar la información. No es “enseñar” nada, no se trata de ser el maestro de nadie. Es como si corrieras en una carrera de relevos; alguien te pasa el testigo y corres con él durante un rato hasta que se lo pasas a otro.
Pero para eso ya tienes a tus hijos ¿no?
_ Ya, pero la información no se para ahí. Este mundo no consiste solo en tus propios hijos, es el mundo en el que vivimos todos. Tienes que hacer algo para que este mundo sea un poquito mejor. Al menos no actuar negativamente, por el bien de todos. Puedes educar a tus hijos para que intenten hacer un mundo mejor - con un poco de suerte - y tú también tienes que intentarlo, aunque solo sea porque es el mundo en el que tus hijos van a vivir... Luego ya te mueres.
¿De quien has aprendido tú?
_De mi amigo Rainer el primero, y el mas importante. Era cinco años mayor que yo. Y antes… fundamentalmente otros músicos… Bob Dylan, Neil Young, Robert Plant…
Leí algo en tu web sobre un extraño encuentro con Bob Dylan, y que no cruzaste una sola palabra con él. ¿Cómo es posible si tanto le admiras?
_ Fue muy raro, no lo sé. Es difícil… Nos encontramos una vez en mi restaurante mejicano favorito en Tucson….
Sí, conozco la historia, la leí en tu diario…
_ … con Robert Plant si que puedo hablar…
Ya, pero tienes la oportunidad de hablar con Dylan ¿y no le dices nada? ¿o es porque no sabías cómo impresionarle?
_Bueno, ese es el problema. …. A veces, sabes, con ellos, con gente así, es suficiente con observar como se mueven, y consigues la información de la que hablábamos antes, simplemente de esa forma. Pero si quieres algo más…Vale, este es el problema; es como pedirle un autógrafo a alguien. ¿Por qué?
Pues porque quieres tenerlo.
_ ¿Por qué?
Porque quieres tener algo que te recuerde que una vez estuviste muy cerca de alguien a quien admiras.
_ ¿Por qué? ¿Por qué quieres conservar eso? Es como un sello en un pasaporte.
¿De pequeño nunca quisiste obtener el autógrafo de alguien a quien admirabas?
_No. Una conversación sí; hablar, sí. Pero no un autógrafo. Quizá pedir un autógrafo es la excusa para entablar después una conversación. Así que ¿por qué no saltarse la parte del autógrafo y directamente hablar con quien quieras hablar?
La mayoría de la gente no se atreve.
_ Ya, creen que es parte del procedimiento. No saben ni por qué lo hacen. Pero lo que quiero decir es; cuando estaba allí con Dylan era como si… ni si quiera podía esperar un saludo. El hecho de que estuviera allí, en este restaurante, era tan surrealista y tan raro, y sabía que yo era el responsable de aquello, había hecho la conexión entre dos puntos para que ocurriera, lo sabía, pero luego estaba allí delante de él y… No pude cruzar la barrera de la conversación. Además llevaba los zapatos equivocados...
¿Qué querías ser de pequeño?
_ Pensaba que sería una buena idea hacer mapas, con fotografías desde el aire. Ir en un avión y tomar fotos del planeta.
¿Y de mayor?
_ Pues espero llegar a hacer eso. Sería un buen hobby.
¿Y crees en la pareja?
_ Esa es una cuestión delicada…
Me refiero al hecho de que dos personas puedan permanecer a gusto juntas toda la vida.
_ Creo que es posible, pero no es natural. … Escuché que un doctor en Paleontología reveló por error que en este planeta, las únicas criaturas monógamas son las que pertenecen a especies cuya hembra es más grande que el macho. Y ese no es el caso de los humanos.
¿Lo reveló por error?
_ Si, creo que la Iglesia Católica le perseguía para intentar que le retirasen el título.
¿Y crees en que haya vida en otros planetas?
_ Mmmmh… sí. ¿Ves? otra pregunta delicada. No se puede ser tan egoísta de pensar que somos los únicos aquí…
La hora de su prueba de sonido ha llegado, y nuestra conversación tiene que terminar aquí. “Tenias razón – me dice- este era un buen sitio para charlar. Buenos árboles… muy agradable”. Howe Gelb se calza sus botas. Se levanta y se despide. Es muy alto.
Howe Gelb actua junto a Isobel Campbell dentro del Ciclo Pop-Rock, el próximo día 21 de Junio en Málaga, el 22 en Granada y el 23 en Sevilla.
Gracias a la mediación de Joan – su no-agent agent - consigo quedar con El Hombre un rato antes de que tenga que probar sonido para su concierto en Madrid. Propone que demos un paseo y así, entre juegos de palabras – su pasatiempo favorito, juraría - comentarios sobre su reciente concierto junto a amigos invitados en el Barbican londinense y alguna que otra digresión acerca del éxito y el fracaso, llegamos a la altura de la Gran Vía donde varios limpiabotas ofrecen su servicio a los viandantes. Mr. Gelb mira sus botas gastadas y decide que necesitan un repaso. Mientras él observa atentamente cómo su calzado vuelve progresivamente a la vida, y yo le observo a él a unos metros de distancia, empiezo a sospechar que la entrevista probablemente ya ha tenido lugar y que mas me valdría recordar bien todo lo que ha dicho desde que empezamos a caminar.
Apostaría a que las entrevistas no son lo que mas feliz le hace en el mundo, lo que unido a su natural dispersión y a lo mucho que me impone este caballero, hace que me resulte casi embarazoso pedirle que nos sentemos unos minutos en algún lado, para poder así sacar mi grabadora y hacerle unas preguntas. Como en realidad es una persona afable, acepta aparcar por un rato su ritmo para seguir el mío. Sobre la hierba en la Plaza de España, se recuesta bajo una sombra y desatándose los cordones de las botas me hace entender que puedo empezar con la entrevista, lo que no es más - como verán - que continuar una conversación:
No dejas que pasen muchos meses entre tus visitas a España…
_ Sí… es que me gusta.
¿Te gusta tanto como para venirte a vivir?
_ Sí, podría mudarme aquí. A Córdoba, que está muy bien… ó Salamanca… Durango… No, no en Durango… ¡Bilbao! No se… Gijón… no… ¿Santiago? ¿Vigo?
Vaya, conoces un montón de ciudades…
_ Mmmm… Vuelva…
Es Hu-el-va. ¿Sabes que ‘vuelva’ sería ‘come-back’, en inglés?
_ ¡Pues perfecto! Ahí. No sé, Barcelona está muy bien también. Es que no me gustan las ciudades interiores y cerradas como Madrid…
¿Perdón? ¿No te gusta Madrid?
_Es que es como París… Necesita un poco de mar ¿no crees?, algún espacio abierto…
¿¡Pero no hay nada que te guste de Madrid!?
_ Bueno, me gusta el tipo que acaba de limpiarme los zapatos en Callao, es como el maestro Yoda; ha devuelto la vida a mis botas. Me gusta un restaurante mejicano que hay por Malasaña. Y la gente; encuentro buena gente en Madrid. Pero ya te digo que la ciudad… es como París…
Así que solo vienes aquí porque es un sitio en el que hay que tocar ¿eh?…¡Mira que no vuelves!
_ ¡Oh, no no no! ¡Me-en-can-ta-Ma-drid! Mira, llevame a cualquier sitio en España, y yo estaré bien. Simplemente Madrid, como ciudad, es demasiado grande para mí. París es muy grande para mí. Al menos cuando las ciudades tienen mar, puedes asomarte allí un poco y quedarte un rato mirando a la nada…
¿Necesitas quedarte mirando a la nada de vez en cuando?
_ Pues sí. Y además yo ya estoy muy mayor para las grandes ciudades. Prefiero las que son pequeñas.
¿Cuántos años tienes?
_ Cincuenta.
No eres tan mayor…
_ Ya hablaremos cuando llegues tú a los cincuenta...
Vale. Cuando te he visto tocar, siempre incorporas las cosas que ocurren en el momento. En lugar de enfadarte porque algo no te sale, o porque se escucha un ruido en la sala, lo incluyes, improvisas… y me pregunto si en el día a día también manejas con esa filosofía lo que te va pasando…
_ Vaya, qué error…
¿Hay un momento concreto en el que decidiste actuar de esta manera o siempre lo has hecho así?
_... ¡¡Es un error total!!
¿Esta entrevista es un error?
_ ¡No! ¡Vivir mi vida de esa forma fue un error! Y me doy cuenta ahora, a los cincuenta. Pienso en el pasado y… ah, no es buena idea. Demasiado disperso.
Pero esto de aceptar las cosas como vienen…
_Sí bueno, soy de los que piensan “a ver qué pasa”. Hay que saber estar alerta, los elementos te avisan de cuándo va a haber un cambio de planes. Haces planes, pero luego pasa lo que tenga que pasar. Es así como funciona la cosa.
Así que no planeas nada nunca…
_ Planea lo que quieras, y luego quédate a mirar como todo se descontrola. ¡Eso es el espectáculo!
Tú estás siempre colaborando con gente muy diferente, jóvenes - y menos jóvenes - que se sienten encantados de hacer cosas contigo. ¿Cómo te sientes sabiendo que otras personas te tienen como maestro, y que alucinan con poder aprender cosas de ti?
_ Bien, si esas personas me gustan… Porque es lo mismo que cuando te haces mayor, siempre tienes que darle a alguien lo que hubieras deseado que alguien te hubiese dado a ti. Tienes que pasar la información. No es “enseñar” nada, no se trata de ser el maestro de nadie. Es como si corrieras en una carrera de relevos; alguien te pasa el testigo y corres con él durante un rato hasta que se lo pasas a otro.
Pero para eso ya tienes a tus hijos ¿no?
_ Ya, pero la información no se para ahí. Este mundo no consiste solo en tus propios hijos, es el mundo en el que vivimos todos. Tienes que hacer algo para que este mundo sea un poquito mejor. Al menos no actuar negativamente, por el bien de todos. Puedes educar a tus hijos para que intenten hacer un mundo mejor - con un poco de suerte - y tú también tienes que intentarlo, aunque solo sea porque es el mundo en el que tus hijos van a vivir... Luego ya te mueres.
¿De quien has aprendido tú?
_De mi amigo Rainer el primero, y el mas importante. Era cinco años mayor que yo. Y antes… fundamentalmente otros músicos… Bob Dylan, Neil Young, Robert Plant…
Leí algo en tu web sobre un extraño encuentro con Bob Dylan, y que no cruzaste una sola palabra con él. ¿Cómo es posible si tanto le admiras?
_ Fue muy raro, no lo sé. Es difícil… Nos encontramos una vez en mi restaurante mejicano favorito en Tucson….
Sí, conozco la historia, la leí en tu diario…
_ … con Robert Plant si que puedo hablar…
Ya, pero tienes la oportunidad de hablar con Dylan ¿y no le dices nada? ¿o es porque no sabías cómo impresionarle?
_Bueno, ese es el problema. …. A veces, sabes, con ellos, con gente así, es suficiente con observar como se mueven, y consigues la información de la que hablábamos antes, simplemente de esa forma. Pero si quieres algo más…Vale, este es el problema; es como pedirle un autógrafo a alguien. ¿Por qué?
Pues porque quieres tenerlo.
_ ¿Por qué?
Porque quieres tener algo que te recuerde que una vez estuviste muy cerca de alguien a quien admiras.
_ ¿Por qué? ¿Por qué quieres conservar eso? Es como un sello en un pasaporte.
¿De pequeño nunca quisiste obtener el autógrafo de alguien a quien admirabas?
_No. Una conversación sí; hablar, sí. Pero no un autógrafo. Quizá pedir un autógrafo es la excusa para entablar después una conversación. Así que ¿por qué no saltarse la parte del autógrafo y directamente hablar con quien quieras hablar?
La mayoría de la gente no se atreve.
_ Ya, creen que es parte del procedimiento. No saben ni por qué lo hacen. Pero lo que quiero decir es; cuando estaba allí con Dylan era como si… ni si quiera podía esperar un saludo. El hecho de que estuviera allí, en este restaurante, era tan surrealista y tan raro, y sabía que yo era el responsable de aquello, había hecho la conexión entre dos puntos para que ocurriera, lo sabía, pero luego estaba allí delante de él y… No pude cruzar la barrera de la conversación. Además llevaba los zapatos equivocados...
¿Qué querías ser de pequeño?
_ Pensaba que sería una buena idea hacer mapas, con fotografías desde el aire. Ir en un avión y tomar fotos del planeta.
¿Y de mayor?
_ Pues espero llegar a hacer eso. Sería un buen hobby.
¿Y crees en la pareja?
_ Esa es una cuestión delicada…
Me refiero al hecho de que dos personas puedan permanecer a gusto juntas toda la vida.
_ Creo que es posible, pero no es natural. … Escuché que un doctor en Paleontología reveló por error que en este planeta, las únicas criaturas monógamas son las que pertenecen a especies cuya hembra es más grande que el macho. Y ese no es el caso de los humanos.
¿Lo reveló por error?
_ Si, creo que la Iglesia Católica le perseguía para intentar que le retirasen el título.
¿Y crees en que haya vida en otros planetas?
_ Mmmmh… sí. ¿Ves? otra pregunta delicada. No se puede ser tan egoísta de pensar que somos los únicos aquí…
La hora de su prueba de sonido ha llegado, y nuestra conversación tiene que terminar aquí. “Tenias razón – me dice- este era un buen sitio para charlar. Buenos árboles… muy agradable”. Howe Gelb se calza sus botas. Se levanta y se despide. Es muy alto.
Howe Gelb actua junto a Isobel Campbell dentro del Ciclo Pop-Rock, el próximo día 21 de Junio en Málaga, el 22 en Granada y el 23 en Sevilla.
Comments:
<< Home
jajaaj si que es verdad que le debe molar españa porque viene cada dos por 3!!! le podias haber preguntado por Gian Sand, siguen existiendo?
en respuesta al comentario anterior: giant sand siguen existiendo (aunque no deja de ser uno de los proyectos personales de howe gelb).
y sobre lo del limpiabotas de gran vía: no fue sólo en esta ocasión. desde hace varios años, siempre que viene a madrid no olvida hacer una visita a su limpiabotas favorito :-)
y sobre lo del limpiabotas de gran vía: no fue sólo en esta ocasión. desde hace varios años, siempre que viene a madrid no olvida hacer una visita a su limpiabotas favorito :-)
Lo que piensa sobre Madrid, el mar ... no es tan extraño, sobre todo si has sido niño al lado del mar.
Guialven: que conste que yo también entiendo lo que dice de Madrid, a pesar de ser madrileña militante-recalcitrante...
Joan: sí, tenia toda la pinta de no ser la primera vez :) (Gracias por tu ayuda, de nuevo).
Publicar un comentario
Joan: sí, tenia toda la pinta de no ser la primera vez :) (Gracias por tu ayuda, de nuevo).
<< Home